El gato temía que le hicieran daño con los experimentos que le contó el perro. Después de estar un rato pensando cómo salir de allí el perro, en una jaula cercana, le dijo:
– Como me has caído bien voy a ayudarte a salir de aquí. Cuando te saquen para hacerte la radiografía distraeré a los vigilantes con un hueso y mientras tú escaparás.
– ¡Muchas gracias, perro!
El gato logró escapar y salir a la calle. Allí se encontró con dos abuelitos que siempre habían querido tener un gato, lo adoptaron y el gatito vivió muy bien.
Y colorín, colorado, esta historia ha terminado.
FINAL HISTORIA 279
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Créditos
Autores: Ali Saksaka e Isaac Torres
Curso: 4º
Centro: Escola Antoni Torroja i Miret
Localidad: Vila-seca
Provincia: Tarragona
País: ESPAÑA
Tutor: Héctor Soldado
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