Volando, el dragón ve algo brillando a lo lejos, sigue la luz y ve a la ardilla. El dragón baja al suelo con la bellota y la pulsera. La ardilla se acerca al dragón y le dice:
– ¿Quieres intercambiar el diamante por la bellota y la pulsera?
El dragón, sospechando de la ardilla, le dice:
– Vale, pero yo te doy primero uno y después el otro, por si acaso te marchas con todo.
La ardilla lo pensó y finalmente contestó:
– ¡Trato hecho!
Se intercambiaron los objetos y contentísimos los dos.
Y colorín, colorado, esta historia ha terminado.
FINAL HISTORIA 18
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Créditos
Autores de este artículo: Alba Herrador Ribero, Evelyn Teran Mejia
Curso: 6º de Primaria
Centro: Ceip Ángel Esteban
Localidad: Benicarló
Provincia: Castellón
País: ESPAÑA
Maestra: Rosana Martinez Bayarri
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